ESA Prueba Radar que Enviará a Lunas Heladas de Júpiter

Una forma de determinar la naturaleza de su subsuelo es atravesar el hielo con un radar. Ese será el objetivo del instrumento Radar para la Exploración de las Lunas Heladas (RIME), el primero de su categoría capaz de realizar mediciones directamente bajo la superficie de objetos planetarios en el Sistema Solar exterior.
Tras el lanzamiento, se desplegará un brazo de 16 m que, una vez en las lunas de Júpiter, transmitirá ondas de radio hacia la superficie y analizará la duración y la potencia con que se reflejan desde formaciones enterradas a unos 9 km de profundidad. El radar será capaz de ‘ver’ detalles verticales de tan solo 50 m.
También ayudará a caracterizar el amplio abanico de variaciones compositivas, térmicas y estructurales que se espera que existan en el subsuelo de estos mundos únicos y geológicamente complejos.
Para poder medir las características clave de la antena y verificar las simulaciones por ordenador, la semana pasada se llevó a cabo una serie de tests empleando un helicóptero que despegó desde el aeródromo de Heiligenberg, cerca de Friedrichshfen (Alemania). La antena se montó sobre un prototipo simplificado de la nave y se suspendió a 150 m por debajo del helicóptero, que voló a una distancia de entre 50 y 320 m del suelo.
Las pruebas se realizaron con la antena y los paneles solares en vertical y horizontal respecto al prototipo, para comprender la interacción entre sus componentes y la antena, y para comprobar las características de las señales recibidas.
El helicóptero ofrecía la flexibilidad de sobrevolar el terreno con maniobras ágiles, incluyendo trayectorias en forma de ocho.
“Todos los experimentos lograron completarse, lo que nos proporcionó una gran cantidad de datos que analizaremos durante las próximas semanas para determinar los siguientes pasos en el desarrollo del instrumento y para mejorar el modelado de las simulaciones de software desarrolladas en el laboratorio”, explica Lorenzo Bruzzone, de la Universidad de Trento (Italia), investigador principal de RIME.
“Con estas pruebas damos un paso fundamental en la comprensión del comportamiento de la antena real, lo que, en última instancia, nos permitirá realizar mediciones muy precisas de los ecos de radar reflejados por el subsuelo de las lunas jovianas”.